¿Qué hacer cuando se produce un traumatismo dental y el diente sale completamente de su alveolo?
Con cierta frecuencia, acuden a las consultas dentales niños que han tenido una caída o un golpe y en ocasiones, algún diente ha salido completamente de su alveolo. Es lo que conocemos como Avulsión dentaria.
La situación como es lógico, se vive dramáticamente, pero en muchas ocasiones se puede volver a colocar y que funcione de manera adecuada, teniendo en cuenta algunas cosas: Lo primero es que el tiempo transcurrido entre el accidente y el reimplante sea muy corto. El diente se cogerá por la corona y no se limpiará ni se frotará para limpiarlo. Tampoco se desinfectará con ningún producto, ni se secará. Lo que puede tenerse a mano es leche entera fría, que permitirá conservar proteger el diente 2-3 horas.
Si el niño no es muy pequeño y puede hacerlo que lo ponga dentro de la boca y lo lleve debajo de la lengua lo más rápido posible al dentista. En caso de tardar en acudir, habría que lavar el diente en solución fisiológica y colocar con presión suave y constante en el interior del alveolo haciendo morder suavemente con un algodón. El dentista realizará la ferulización del diente y prescribirá los fármacos oportunos. El diente avulsionado precisará controles periódicos para comprobar si aparecen complicaciones.